"...cuando duermes le dices adiós/a los que sólo quieren verte crecer/

y aún sueñas con princesas/duendes y brujas de esas/

que se esconden en tu habitación..."

Hubo una vez, hace muchos años, una niña muy pequeña que vivía en un mundo habitado por dioses mitológicos, animales fantásticos, princesas y caballeros cargando pesadas armaduras que libraban grandes batallas por el honor de reyes y reinas.

Esta pequeña vivía en un castillo muy grande rodeado de bellos jardínes y lagos de agua cristalina, con flores que abrian sus pétalos para saludar al sol y la luna cada día, de embriagantes aromas y brillantes colores, flores que adornaban un sendero al final del jardín coronado por un frondoso árbol cuya fresca sombra acariciaba una banca de concreto testigo de secretos pronunciados por largos años.

Un día llegó un niño con un ramo de flores blancas a visitar a nuestra pequeña dama, él venía de un castillo vecino cuyo foso era famoso por acabar con dos que tres invasores curiosos por conocer la vida al interior de aquel sombrío hogar. Nuestro pequeño caballero venía montado sobre un hermoso córcel blanco como la espuma que corona al mar, descendió con tal majestuosidad y gracia que nuestra damita le regaló una curiosa reverencia, recibó el ramito de florecillas silvestres y soltó carrera hasta el final del jardín perseguida por el pequeño que había dado orden a su córcel de pastar tranquilo; ambos niños corrieron, se persiguieron, rodaron, brincaron, jugaron hasta quedar exhaustos tendidos en el césped platicando de los sueños que tenían y decidieron tomar asiento bajo aquél árbol que al pequeño traía lejanos recuerdos.

Cayó la noche y con ella el silencio de una luna llena que observaba la curiosa escena de un correcto caballerito tomando la mano de una hermosa damita, susurrándose ambos al oído que siempre se cuidarían, miradas de devoción con dos promesas de amor eterno y sellando el pacto con un tierno beso.

Sólo la luna, el viejo árbol, el murmullo del viento y la mirada del blanco córcel que los acompañaría en el trancurso de sus aventuras...

-Video tomado de Youtube por complicesmusic-